Al no ser muy largo el recorrido de la 4ª etapa de la Ruta Ignaciana, hemos podido disfrutar del monte y poder ver con tranquilidad algunos de los pueblos del Valle de Larraun.
Comenzamos en BETELU y nos dirigimos a las inmediaciones de ERRAZQUIN, situado en la hondonada que se forma bajo Albiasu, en el rincón más oriental de la Malloas, seguimos por una senda ascendente hacia BARAIBAR
con casas, la mayor parte de ellas de los siglos XVIII y XIX, son grandes, con entramados de madera y en sus fachadas el escudo del Valle. En Baraibar parada para descansar, almorzar e incluso comprar queso de Idiazabal.
Seguimos por un camino llano dirección IRIBAS, pueblo situado al borde del nacedero del Larraun, su caserío se extiende sobre la llanada previa a la Sierra de Aralar, la iglesia dedicada a San Juan Bautista, es de comienzos del Siglo XIII, con una bella y bien conservada portada, protegida por un pórtico.
Continuamos hasta Lekunberri y desde aquí en autobús subimos a ASTIZ que ocupa una posición central en este valle alto, entre Alli y Madotz, en la subida pudimos observar unas inmensas praderas verdes cubiertas de flores amarillas, en las que pastaban tranquilamente los caballos, haciendo honor al significado de la palabra Larraun: "sitio de pastizales".
Comimos en el alberque que se quedó pequeño por la cantidad de gente que allí coincidimos, no es la primera vez que comemos en este lugar y por el buen servicio y buen menú, seguramente habrá más visitas.
Ermita de San Donato
en Baraibar
Iglesia de San Juan Bautista en Iribas
Molino de Alli en el rio Larraun
Nuestro pensamiento ya está puesto en la siguiente etapa
Con la colaboración fotográfica de Iñigo y Vicente
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